top of page

Fractura Patológica

Debido a la migración de un tumor primario al hueso, este se va debilitando y va perdiendo su resistencia lo que ocasiona una ¨fractura patológica¨ en un hueso previamente sano.

El síntoma más común con el que los pacientes acuden es el dolor, sea en reposo o al caminar, y en ocasiones se presenta directamente como una fractura sin historia de algún trauma previo lo cual nos alerta sobre este tipo de problema.

La fijación profiláctica es un procedimiento en el cual se coloca un implante metálico para proteger al hueso de este tipo de fracturas y esta indicado en los pacientes con metástasis óseas que corren el riesgo de tener este problema.

Cuando se evalúa una metástasis ósea, se tienen en cuenta varias características en el examen físico como: el dolor, el tipo de lesión, el tamaño, el lugar en el que se encuentra. Además, se realiza estudios complementarios a través de exámenes específicos para determinar la presencia de otras lesiones en otros lugares del cuerpo.

 

Después de asociar toda esta información, se decide si el paciente es candidato para una fijación profiláctica. Siempre es importante recalcar que esta evaluación es dinámica, es decir, puede variar de una consulta para otra, por eso es importante mantener un seguimiento estricto de nuestro paciente.

El traumatólogo encargado del tratamiento de estas lesiones requiere conocimientos y técnicas específicas sobre el manejo de las fracturas, con lo cual es imprescindible lograr una estabilidad inmediata y devolver la movilidad al paciente es fundamental.

Tras la cirugía el paciente puede iniciar la rehabilitación inmediata y la estancia en el hospital es relativamente corta.

 

El tratamiento adjuvante (sea con quimioterapia o radioterapia) puede realizarse una vez que cicatricen las heridas y tiene que estar coordinado con el equipo multidisciplinar (oncólogo o radiólogo) del paciente.

fractura patologica
fractura patologica.jpg
bottom of page